¿Cómo funciona la industria eléctrica en México? Parte 1

¿Cómo funciona la industria eléctrica en México? Parte 1

“Corresponde exclusivamente a la nación generar, conducir, transformar, distribuir y abastecer energía eléctrica que tenga por objeto la prestación del servicio público. En esta materia no se otorgarán concesiones a los particulares, y la nación aprovechará los bienes y recursos naturales que se requieran para dichos fines”.

Adolfo López Mateos.

Industria eléctrica en México: un reto de generación

Generar la energía eléctrica necesaria para el consumo de un país no es una tarea sencilla. Esta actividad requiere de una gran cantidad de inversión por parte del gobierno. Principalmente para generación, transmisión, distribución, monitoreo, y mano de obra para el mantenimiento que permita asegurar el óptimo desempeño. Y no solo eso, también necesita de un constante desarrollo tecnológico indispensable para mantener los costos operativos y la actualización de los sistemas.

Tras la nacionalización de la industria eléctrica en México hace ya sesenta años todas estas tareas recayeron principalmente en dos entidades: la Comisión Federal de Electricidad y la disoluta Luz y Fuerza del Centro quienes eran regulados por la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, esto aseguraba el cumplimiento de la ley y garantizaba al pueblo mexicano la capacidad de regular los costos de la energía para sí mismo

Este sistema se mantuvo hasta 1992 donde tras las reformas al sector eléctrico permitieron la participación (aunque limitada) a productores independientes y pequeños productores del sector privado. Sin embargo no tenían un peso significativo dentro de la producción de energía eléctrica ya que su finalidad era vender energía a la misma CFE y LFC cosa que limitaba su participación. Por consecuencia CFE y hasta hace algunos años LFC eran los únicos responsables de las tareas necesarias para dar electricidad al país.

Economía eléctrica: un cambio necesario.

Si bien este sistema permitía brindar un servicio económico y de calidad para mucha de la población. En su momento no vislumbraba las implicaciones negativas que traerían para el estado.

Siendo México el país en vías de desarrollo que es, su población crece aceleradamente y por lo tanto su demanda de energía (misma que se estima se duplicara para 2030); en consecuencia crece la carga de trabajo para las entidades encargadas de suministrar el servicio, en este caso la CFE. De manera que, en la última década el modelo en el cual la CFE funge como la única entidad encargada de todos los aspectos que confieren a la energía eléctrica en el país se ve puesto en tela de juicio.

Por ejemplo tan solo generar la energía eléctrica necesaria para el país representa la mitad del gasto de la empresa. Esto dificulta la capacidad de esta para dirigir recursos a otros procesos necesarios para su funcionamiento óptimo. Cosa que también dificulta varios otros procesos de la empresa.

Por otro lado, la generación de la energía en México representa uno de los sectores más contaminantes de tal manera que poco mas del 80% de la misma es resultado de la quema de combustibles fósiles. Esto aunado al hecho de que el país presenta un evidente retraso en materia energética; siendo el tercer puesto con menor avance en materia de eficiencia energética. Evidenciaban la necesidad de un cambio en el desarrollo de las actividades que confieren al sector eléctrico del país.

El nuevo sistema de la industria eléctrica.

Tras la reforma propuesta en 2013 en materia de energía. En 2014 entra en función la Ley de la Industria Eléctrica y con ella una re-estructuración de la cadena que involucra a los generadores de energía hasta el consumidor final. Con esta nueva ley la CFE sigue siendo la encargada de la mayoría de los procesos (transmisión y distribución). Pero permite cambios a la forma en la que la generación y comercialización se realizan.

A su vez los organismos reguladores adquieren nuevas capacidades y se crean nuevos tipos de usuarios y formas de comercio energético. Esto trajo consigo un nuevo sector eléctrico más abierto al crecimiento, a la incorporación de nuevas tecnologías y a la inversión privada en materia energética.

Como puedes ver las motivaciones para un cambio eran más que evidentes. En la segunda parte te explicamos como es que los generadores interactúan para solventar la demanda energética del país.

Referencias

 

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